La portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha puesto de ejemplo a la francesa Giséle Pelicot, que sufrió violaciones durante años por decenas de hombres bajo sumisión química administrada por su marido para hacer un llamamiento a la población general para modificar actitudes y denunciar la violencia de género por parte de las víctimas, pero también por parte del entorno de las mismas. De Miguel ha señalado el coraje de Pelicot, que, en el juicio celebrado en París, ha mirado directamente a la cara de sus agresores: "Esta mujer nos ha dado una lección muy importante, que es que la vergüenza tiene que cambiar de bando", aseguró este 25-N, el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Para la portavoz de la formación de izquierdas, ese paso adelante es "precisamente esto es algo imprescindible para las mujeres que sufren o han sufrido agresiones". Las declaraciones las realizaba antes de asistir al acto institucional celebrado en Mérida, al tiempo que se dirigía a las instituciones para que lanzasen el mensaje con claridad sobre su papel para erradicar la violencia machista: A su juicio, la sociedad debe tener constancia de " que arropamos, apoyamos y creemos a las mujeres víctimas, y que denuncien o no denuncien, tienen derechos".
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Sin declaración institucional
Por eso, ha lamentado que, un año más, Extremadura no cuente con una declaración institucional de condena contra la violencia machista porque Vox ha vuelto a desmarcarse. También ha mostrado su pesar porque el PP extremeño "se esté dejando arrastrar por aquellos que niegan la violencia machista y por quienes acogen en sus filas a agresores, como es el partido Vox".
La portavoz de Unidas por Extremadura ha criticado que el gobierno regional del PP, "que se autodenomina feminista", entienda "las políticas de igualdad de forma muy extraña" y lamentó que el proyecto de Presupuestos de 2025 mantenga la misma partida que el año anterior para las oficinas de igualdad, "lo que va a provocar que estas oficinas tengan que cerrar tres meses al año y sus profesionales tengan cartas de despido".
"No olvidemos que estas oficinas suponen una herramienta indispensable para luchar contras las violencias machistas en el medio rural, donde las mujeres, de media, tardan 20 años en denunciar", señala De Miguel, quien ha considerado que el compromiso del PP con la lucha contra la violencia hacia la mujer "no es un compromiso real". Al hilo de esta afirmación, ha señalado que el Partido Popular se ha negado a incorporar en todas las etapas educativas la Educación Sexual Integral, como recomiendan desde organismos internacionales, "a pesar de que el número de denuncias por agresiones sexuales cometidas por menores ha aumentado un 160 por ciento en Extremadura". Y ha puesto en solfa a los populares por haber "votado en contra el pasado jueves de una iniciativa nuestra que tenía como objetivo atajar las violencias, fortalecer el Pacto de Estado y poner objetivos claros en las políticas que se van a llevar a cabo con el dinero del Pacto de Estado". Denunció lo ocurrido en localidades extremeñas en el anterior ejercicio: "No puede ser que esos fondos terminen, como hizo el Ayuntamiento de Plasencia, sufragando un desfile de moda a beneficio de una organización que se encarga de hostigar a las mujeres que acuden a los centros de interrupción voluntaria del embarazo", reprochó.
Por todo ello, Irene de Miguel concluye que el compromiso del gobierno del PP en la lucha contra la violencia machista "es puro papel mojado". "Ya nadie cree que realmente tengan voluntad de cambiar las cosas", ha insistido la portavoz de Unidas por Extremadura.
“Fuente: El Periódico Extremadura